Hoy en día la sociedad quiere personas activas, resolutivas, autónomas, creativas, capaz de afrontar problemas…
Estas competencias son fundamentales para el desarrollo óptimo y saludable de la persona, pero también imprescindibles para el proceso de aprendizaje. Competencias que deben trabajarse desde bien pequeños.
Para ello en educación infantil hacemos uso de materiales no figurativos, ni estructurados para que el niños se convierta en un ser activo. Materiales recuperados, que les ofrecemos una segunda vida y que generan actividad creativa.